La torsión testicular es el más grave de los procesos agudos que afectan el contenido del escroto porque puede resultar en la pérdida del testículo.
Para que esto suceda las fibras que sostienen el testículo son débiles y permiten la rotación sobre su propio eje resultando en torsión de los vasos que nutren el testículo
Dolor agudo e intenso en un testículo que no se quitan a pesar de medicamento o con cualquier otra maniobra.
Si, definitivamente es una urgencia y es de las más graves, existe un término llamado “ventana de tiempo” donde es el tiempo en el que aún se puede hacer algo por el órgano, si se pasa de esa “ventana de tiempo” es muy posible que los resultados después de tratamiento urgente no sean los mejores, en este caso significaría la pérdida del testículo afectado.
En la literatura se reporta una ventana de tiempo de 6 horas desde que inicia el dolor, no deben dejar pasar más allá de las 6 horas, de lo contrario los resultados pueden ser catastróficos.
No es un número absoluto, hay personas que su propio cuerpo hace que la ventana de tiempo sea menor, por lo tanto la mejor recomendación es acudir inmediatamente con el urólogo.
Se debe evaluar la vitalidad del testículo, ver si la falta de sangre no lo afectó, si es un tejido muerto se optará por remover el testículo, si es viable o salvable el testículo se optará por fijarlo en su lugar y destorcerlo.
Si el tejido es viable se realizaría una cirugía llamada “orquidopexia” que es el término para colocar y fijar en su sitio al testículo y así evitar que vuelva a suceder otra torsión, muchas veces se interviene el testículo no afectado para evitar que en un futuro se tuerza.
Si el tejido es no viable y ya hay necrosis (muerte del tejido) se retirará el testículo lesionado una cirugía llamada “orquiectomía”.